Cómo pasa el tiempo, de repente ya estamos en el tercer aniversario de la página. Parece que fue ayer cuando empezó todo, pero también en algunos momentos me parece que fue hace siglos. Este año, por varias razones, hemos publicado bastante menos, aunque sí que hemos añadido más reseñas, más efemérides, más cosas que nos encantan… Y habrá que celebrar y conmemorar que aquí seguimos, con La Gata Negra de bigotes blancos.
Las razones de la bajada seguramente son la pereza y también probablemente la pandemia, aunque solo nos ha afectado medio año. También a haber perdido una de las inspiraciones de la página, Tari, mi querida gata negra de bigotes blancos, que era ya muy mayor. Murió con 19 años y unos meses en noviembre, y todavía no he sido capaz de escribir la reseña del último libro que fotografié junto a ella. A finales de febrero, además, desapareció mi gato Rigo, como si se lo hubiera tragado la tierra, y eso también ha hecho que esté más desanimada en general. Y, en particular, para publicar.
Datos y estadísticas
Estadísticas pocas, más bien son datos y curiosidades (qué páginas han sido más visitadas según Google Analytics, básicamente). En general ha habido un bajón en la creación de nuevas entradas, incluso en las reseñas, aunque se ha notado mucho más en las otras categorías. En los últimos 366 días (2020 es bisiesto, así que hemos tenido un 29 de febrero) solo hemos publicado una entrada de Bendita juventud, una de Secretos (in)confesables, una de We ♥, cuatro de Ágora, una de Cajón de sastre, y ninguna tanto de Vacaciones literarias como de Cómo descubrí…
Durante estos tres años hemos publicado 480 reseñas, 117 este tercer año. De todas esas reseñas, las tres más visitadas desde el 15 de octubre de 2019 hasta ayer han sido La chica del cumpleaños, de Haruki Murakami (que el año pasado quedó segunda), Inocencia trágica, de Agatha Christie (el año pasado fue la primera), y Dientes blancos, de Zadie Smith.
Lo más curioso es que ha habido un repunte de visitas este último mes de Patria, de Fernando Aramburu, probablemente por la serie que se ha estrenado recientemente. Y de las nuevas reseñas, la más vista ha sido El enigma de la habitación 622, de Joël Dicker, publicada en julio.
En general las entradas más visitadas son las de la categoría Ágora, donde recopilamos frases de escritores y escritoras sobre algún tema en concreto, y las más visitadas han sido «Todo es política», «La belleza sutil de la duda» y El único egoísmo aceptable es (que con esa intriga no me extraña que sea de las más visitadas). Y en Bendita juventud, como viene siendo habitual desde que se publicó en 2017, la más visitada es El Romance de la doncella guerrera. Que, además, es la más visitada de todas en el último año (11,46% de todas las visitas).
Como el año pasado, en We ♥ ha vuelto a destacar (y mucho) We ♥ Gatos (es la segunda más visitada, con el 7,56%), pero también Historias de detectives. La entrada más visitada de Cómo descubrí… ha sido Cómo descubrí… la mitología griega (igual que el año pasado). Y en Secretos (in)confesables, Leer el final de los libros antes de tiempo (seguido muy de cerca por La Pimpinela Escarlata, la más vista el año pasado).
En general las categorías con entradas menos visitadas son Cajón de sastre, donde destacó Propósito de leer más, y Vacaciones literarias, siendo la más visitada la de Lago de Ginebra y Byron, Shelley, Nabokov…
Evolución en las reseñas y otras entradas
Creo que las dos, Concha y yo (Sandra), hemos ido mejorando a la hora de expresarnos, pero yo sí que he notado un gran cambio entre las primeras reseñas y estas últimas. Y no sé si es mejor o peor, pero cada vez me salen unas reseñas más largas y eso hace que me cueste más escribirlas. Como ejemplo, dos reseñas de Kerry Greenwood, Una detective inesperada y Un misterio de altos vuelos. La primera es de 2018, con 464 palabras, y la segunda de 2020, con 1126, más del doble. Pero últimamente no puedo evitarlo, quiero contar todo lo que me ha hecho sentir el libro, lo que me ha gustado y lo que no, y me cuesta despacharlo con pocas palabras (y eso que quito mucho, o siento que quito mucho, pero aun así crecen y crecen las reseñas). Creo que el aumento ha sido bastante gradual, igual que me pasó con las efemérides, aunque ahí he llegado a un consenso conmigo misma: no pasar de 200 palabras en cada efeméride, pero al principio me salían hasta de solo 137…
Lo que sí que nos ha pasado a las dos es que, a veces, hemos dejado pasar un cierto tiempo entre leer el libro y escribir la reseña (bueno, yo concretamente llevo mucho más retraso, pero el retraso que llevo creo que ni lo contaría en Secretos (in)confesables). En mi caso sé que es por pura pereza y porque me sale el perfeccionismo, por lo que no termino de estar contenta con lo que he escrito, y pienso que si lo dejo reposar se me ocurrirá algo mejor. A veces es verdad, y otras veces ni por esas, y se puede quedar en el limbo de los borradores durante una temporada. En el caso de Concha puede que se deba a la situación que hemos vivido, y seguimos viviendo, con la pandemia, que también hizo que le costara mucho más leer. Porque esto de no hacer la reseña al terminar el libro le ha pasado recientemente. Lo de leer menos también me pasó los primeros días del estado de alarma en España, allá por marzo, pero por suerte las dos hemos vuelto a leer como antes, y a encontrar refugio en la lectura.
Recordando el pasado
Inexplicablemente no lo hice en los anteriores aniversarios, pero esta vez se me ha ocurrido poner los enlaces de cómo fueron la inauguración de la página y los anteriores aniversarios. Porque una de las cosas que más me gusta es conectar y enlazar dentro de esta página web (cada persona tiene sus rarezas, y a mí me encanta encontrar relaciones entre las cosas, y facilitar que las demás personas también las vean), y, además, me gusta ver cómo evolucionan las cosas. En este caso me sirve para ver cómo ha evolucionado desde la ilusión contenida de la inauguración, lo escueto que fue el primer aniversario (claro que tampoco se podían hacer comparaciones), el segundo año con menos fuerza…