Sinopsis

El día en que ETA anuncia el abandono de las armas, Bittori se dirige al cementerio para contarle a la tumba de su marido el Txato, asesinado por los terroristas, que ha decidido volver a la casa donde vivieron. ¿Podrá convivir con quienes la acosaron antes y después del atentado que trastocó su vida y la de su familia? ¿Podrá saber quién fue el encapuchado que un día lluvioso mató a su marido, cuando volvía de su empresa de transportes? Por más que llegue a escondidas, la presencia de Bittori alterará la falsa tranquilidad del pueblo, sobre todo de su vecina Miren, amiga íntima en otro tiempo, y madre de Joxe Mari, un terrorista encarcelado y sospechoso de los peores temores de Bittori. ¿Qué pasó entre esas dos mujeres? ¿Qué ha envenenado la vida de sus hijos y sus maridos tan unidos en el pasado? Con sus desgarros disimulados y sus convicciones inquebrantables, con sus heridas y sus valentías, la historia incandescente de sus vidas antes y después del cráter que fue la muerte del Txato, nos habla de la imposibilidad de olvidar y de la necesidad de perdón en una comunidad rota por el fanatismo político.

¿Por qué me decidí a leerlo?

No me interesaba nada el tema y no tenía intención de leerlo, pero tengo una buena amiga con la que coincido bastante en lecturas y me lo recomendó. Desde ese momento no paré de oír hablar del libro, así que ya me decidí a leerlo.

¿Mereció la pena?

Se ha hablado tanto de este libro que no quiero hacer una reseña demasiado larga para no aburrir, pero claro que mereció la pena, esperaba encontrarme un libro muy denso y me encontré un libro de fácil lectura, lleno de humor e ironía y muy humano. El punto fuerte de la novela es su temática vista desde diferentes puntos de vista, la relación entre dos familias, la de la víctima y la del asesino, eso sí, al final todos son víctimas.

¿A quién se lo recomiendo?

A todos aquellos que les gusten los libros con capítulos breves que adoptan la unidad de un cuento.

A los que no les gusta que la novela tenga una cronología estricta, porque es más bien una sucesión de naturaleza emocional.

A todos aquellos que les guste conocer una época negra de nuestra historia y es que este libro se enfrenta a un tema delicado, la lucha armada y el encarcelamiento de sus héroes, la hipocresía ocultando sus víctimas, la constitución de una mentalidad de pueblo superior, elegido y perseguido, el bochornoso papel de la Iglesia católica. En resumen, la división de una comunidad en buenos y malos.

Ritmo de Lectura

Tiene tan fácil lectura y tanta ironía que me enganchó desde el primer momento, me lo he leído en cuatro días y me dio mucha pena que se acabara.

¿Volverías a leer algo de este autor?

Ya he empezado a mirar otros títulos de él a ver por cuál de ellos me decido, pero de momento el que tiene más posibilidades es Años lentos, que escribió en 2012 y es justo el anterior a Patria.