No es lo mismo, pero sí que tienen mucho que ver. Después de todo sonrisa viene de risa, con el prefijo son-, que significa «por debajo». Y en algunas de las frases escogidas la risa y la sonrisa igual podrían ser intercambiables. Reconozco que, si un libro tiene humor, y me hace reír o me arranca una sonrisa, lo disfruto mucho más.
Desde el momento en que cogí su libro me caí al suelo rodando de risa. Algún día espero leerlo.
La frase es del actor (y también escritor) Groucho Marx, demostrando lo divertidos que pueden llegar a ser los libros, incluso sin abrirlos.

No todos los escritores usan el humor para comunicarse con sus lectores, pero sí que tienen sus opiniones sobre la risa y la sonrisa. Y aquí van algunas…
¿Qué es la risa? Para Victor Hugo, esto:
La risa es el sol que ahuyenta el invierno del rostro humano.
Y Oscar Wilde creía que es importante en la amistad:
La risa no es un mal comienzo para la amistad. Y está lejos de ser un mal final.
La risa casi siempre es contagiosa, pero para Charles Dickens era lo más contagioso (pero también podría serlo la sonrisa):
No existe nada en el mundo tan irresistiblemente contagioso como la risa y el buen humor.
O dicho con las palabras de Jacinto Benavente:
Nada prende tan pronto de unas almas en otras como esta simpatía de la risa.
Pedro Muñoz Seca pensaba que la risa no siempre es buena, o mejor dicho, puede ser necesario justo lo contrario:
A veces el llanto hace más beneficio que la risa.
Gabriela Mistral hasta relacionaba la sonrisa con otra forma de llorar:
Hay sonrisas que no son de felicidad, sino de un modo de llorar con bondad.
Hacer reír es muy poderoso, así lo pensaba Mark Twain:
La raza humana tiene un arma verdaderamente eficaz: la risa.
Y William Shakespeare pensaba lo mismo de la sonrisa:
Es más fácil obtener lo que se desea con una sonrisa que con la punta de la espada.
Doris Lessing seguro que recomendaba reír porque:
La risa es, por definición, saludable.
Y, para terminar, un proverbio escocés que da otra buena razón para reír y sonreír mucho más, por si lo hacemos pocas veces:
La sonrisa cuesta menos que la electricidad y da más luz.