Sinopsis
La biografía de uno de los iconos femeninos del siglo XX, una actriz adorada por su ingenua belleza. Hablar de Audrey Hepburn es hablar de estilo y elegancia. A lo largo de su extraordinaria carrera como actriz, esta dama de apariencia frágil conquistó a hombres y mujeres desde la pantalla, y hoy es ya un icono del siglo XX. Todos recordamos a la jovencita que descubría el amor a lomos de una Vespa en Vacaciones en Roma, a la excéntrica señora que paseaba de madrugada por las calles de Nueva York en Desayuno con diamantes y a la chiquilla que aprendía modales en My Fair Lady, pero casi nadie conoció a fondo a la persona que estaba detrás de estos espléndidos personajes. Donald Spoto, el biógrafo por excelencia de los grandes de Hollywood, ha dibujado un emotivo retrato de la diva: la infancia en Holanda durante la Segunda Guerra Mundial, los primeros pasos en el mundo del cine, el triunfo como actriz, sus desgraciadas aventuras matrimoniales y la dedicación generosa a los más pobres en los últimos años de su vida. Las voces de Gregory Peck, Fred Astaire, Gary Cooper, Cary Grant y muchos otros colegas y compañeros desfilan con humor y admiración por las páginas de esta biografía que, al contarnos la historia de una mujer inolvidable, nos entrega también una magnífica historia del cine que más amamos.
¿Por qué me decidí a leerlo?
Después de verla en Charada con mi querido Cary Grant y en otras películas se convirtió en una de mis actrices favoritas. Y cuando me enteré de que había lectura conjunta (por iniciativa de La pecera de Raquel) de su biografía decidí unirme, y así poder leerla y también comentarla.
¿Mereció la pena?
Sí, me ha gustado descubrir muchas cosas que desconocía de esta actriz, y también algunas de Cary Grant que tampoco sabía. Y ha hecho que me guste no solo como actriz, también como persona. Además de un encanto, como sugiere el título en inglés, fue una mujer comprometida con una buena causa, buena amiga y muy empática. Y, a pesar de ser insegura, también tuvo bastante claro lo que quería y luchó por ello, aunque a veces se equivocara, por ejemplo, en algunas relaciones de pareja. Es una biografía muy bien documentada y con muchas notas para saber de dónde salen las frases literales: de entrevistas hechas por el propio autor, revistas, periódicos, documentales, cartas escritas por Audrey o para ella… A mí eso, por un lado, me ralentizaba la lectura, por tener que ir a las notas continuamente (soy incapaz de resistirme y no leerlas). Y, por otro, me parecía que a veces esas fuentes servían para adelantar cosas de la historia (por ejemplo, saber si conseguiría ser madre o no, con lo mucho que lo deseaba). Si sabes mucho sobre su historia no es realmente un problema, pero si quieres descubrirla poco a poco te puede llegar a fastidiar.
Aunque realmente el gran fastidio (compartido por todas las que participaron en la lectura conjunta) es que Donald Spoto desvela los finales de varias de las películas, y sin avisar. En algunos casos (pocos) me parecía que tenía cierto sentido porque había un paralelismo entre la vida de la actriz y sus películas. Bien por parecerse al personaje, como en Vacaciones en Roma, o bien porque supuso un cambio en su vida, aunque fuera años después, como Historia de una monja. Aun así, creo que el autor podría haber puesto mucho más cuidado y no revelar tanto. Pero las partes en las que describe los rodajes me encantaron. Saber de las peleas, malentendidos, problemas técnicos, cambios en los guiones, y demás, me parecía fascinante. Igual que las negociaciones para hacer una película o cómo eran los contratos, a veces curiosos, y otras veces con alguna pequeña trampa, como en My Fair Lady, donde a Audrey la engañaron sobre las canciones. También me quedó claro que el autor y yo no coincidimos en la valoración que hace de algunas películas.
Está dividido en cuatro partes: Los inicios (1929-1950), La fama (1951-1956), El éxito (1957-1970) y Encanto (1971-1993). Y en total tiene 17 capítulos. Mi capítulo favorito fue el 12, cuando el autor comenta el rodaje de Charada. Por suerte esta película no la termina de destripar, porque sería una tragedia no haberla visto y tragarte el final alegremente, siendo una película de suspense. Algunos capítulos me resultaron muy duros, sobre todo su infancia, con todo lo que le tocó pasar durante la Segunda Guerra Mundial, o cuando sufría depresiones. Y, por supuesto, el último capítulo. El final ya me lo esperaba, como en casi todas las biografías es lógico el desenlace con la muerte, pero, a pesar de ser muy triste porque murió demasiado joven, no fue tan duro como pensaba. Me pareció que en ese capítulo final el biógrafo usó todas sus dotes de escritor y describió mucho mejor cómo se vivieron esos momentos y resumió quién fue Audrey Hepburn. Además, es justo el capítulo en el que menos notas a pie de página había, así que la lectura me resultó más fluida.
Lo leí en formato digital y eso ha hecho que me perdiera algunos detalles en el momento adecuado. Porque hay dos tipos de notas a pie de página (o más bien al final del libro), unas numeradas, que son las fuentes de las frases entrecomilladas, y otras con asterisco, que son aclaraciones del autor o del traductor, Fernando Garí Puig. En mi ereader es difícil pulsar para que te lleve a la nota exacta, así que suelo ir a las páginas de notas y luego voy marcando las páginas para regresar sin problemas a la última nota que leí. Con esa «elaborada» técnica conseguí leer las notas numeradas perfectamente. Pero los asteriscos ni siquiera sabía dónde estaban (luego ya vi que detrás de las notas numeradas). Total, que descubrí a qué iban haciendo referencia esos minúsculos asteriscos al terminar el libro, y por suerte recordaba más o menos a qué parte correspondía. Pero lo suyo hubiera sido leerlo en el momento.
¿A quién se lo recomiendo?
A quien quiera conocer la vida de Audrey Hepburn y no busque una biografía novelada. Y mejor en papel que en ebook.
Ritmo de lectura
Al ritmo de la lectura conjunta, un capítulo al día (17 días). Si la hubiera leído yo sola no creo que el ritmo hubiera sido mucho más rápido, porque tampoco es una lectura que me haya tenido muy enganchada queriendo llegar al final. Es mejor ir disfrutando poco a poco de las vivencias de Audrey Hepburn.
¿Leerías algo más del autor?
No lo sé. Creo que solo ha escrito biografías, que no es mi género favorito, y si he disfrutado de la lectura ha sido sobre todo por Audrey, y no tanto por el estilo del escritor. Aunque igual sí que me animo a leer su biografía de Ingrid Bergman, que también me gusta mucho.