Sinopsis
Recién cumplidos los dieciocho años, el protagonista de esta novela pasa dos días y sus noches con su padre en Marsella. Su infancia había estado marcada por la epilepsia y su familia decidió llevarlo a ver a un médico de esa ciudad que proponía una posible cura con una nueva medicación. Tres años después de iniciado el tratamiento, tiene que regresar allí para comprobar si ha superado la enfermedad. Esta vez solo lo acompaña su padre y, para valorar la curación, el chico deberá permanecer dos días sin dormir. Durante esas largas horas insomnes que pasan, padre e hijo deambulan por la ciudad, acuden a un club de jazz, atraviesan barrios poco recomendables, toman un barco para ir a una playa local, conocen a dos mujeres que los invitan a una fiesta, el chico vive su iniciación sexual, el padre le confiesa intimidades de las que jamás le había hablado…
¿Por qué me decidí a leerlo?
Lo vi en una reseña de Instagram y la sinopsis me pareció interesante. No había leído nada del autor y siempre me gusta conocer nuevos escritores, y, por último, que fuera un autor italiano también me apetecía, porque hace mucho que no leo literatura italiana.
¿Mereció la pena?
Me ha encantado este precioso libro, lleno de belleza, en el que en dos días y sus noches un padre y un hijo comparten momentos maravillosos que el hijo no podrá olvidar jamás. Con un título tomado de una frase del libro Suave es la noche de Scott Fitzgerald: “En la verdadera noche oscura del alma son siempre las tres de la mañana”. Y me ha encantado cómo cuenta el autor, desde la mirada del hijo, esa relación paternofilial de dos días, con momentos decisivos para él, recorriendo una ciudad desconocida con mucho buen rollo entre los dos.
Contado en primera persona, el protagonista primero nos cuenta cómo en su niñez sufre la enfermedad y el poco cariño que siente por su padre, al que culpa de la separación de sus padres. Pero lo importante es cuando padre e hijo, a pesar de todas esas diferencias que tienen, viajan juntos para una revisión de la enfermedad, cuando el hijo ya tiene 18 años. Y allí empiezan a hablar por primera vez de forma natural, y empiezan a conocerse verdaderamente. El hijo se da cuenta, por primera vez, de cómo es su padre en realidad, y no bajo el velo de rencor que él tenía en los ojos.
Me ha gustado la forma en la que el personaje enfrenta la enfermedad. Pasa de sentirse mal por ser un enfermo, que no puede hacer algunas cosas y encerrarse no solo en sí mismo sino también en su casa, aislándose del resto de amigos con una depresión más que evidente, a pensar, gracias a un médico, que es un ser especial por tener la enfermedad, ya que muchos genios la han tenido, y consigue sentirse como una persona excepcional.
Otra cosa que me ha gustado mucho del libro es que se le ha dado protagonismo al padre. En literatura hay muchas novelas que se dedican a la relación entre madres e hijas o madres e hijos, pero mucho menos con un protagonista hombre. Aunque también ha sabido incluir a la madre, de una manera no tan central como la del padre.
La enfermedad, aunque importante en la novela, es una excusa perfecta para juntar a ese padre y a ese hijo. Y para que hablen entre ellos de muchos temas de una forma muy intimista, sobre sus miedos, sus logros, sus relaciones entre ellos y con los demás, sobre la vida en general y lo imprevisible que puede ser a veces.
Es una novela de iniciación a la vida del joven, que aún no conoce ni el amor ni el sexo. Y en este viaje descubre por fin la sexualidad, pero también las consecuencias que tienen nuestros actos y la responsabilidad que por ello tenemos.
¿A quién se lo recomiendo?
A los que os gusten las novelas intimistas de iniciación de un joven a la vida, de paseo por Marsella con su padre, durante dos días y dos noches, sin poder dormir.
A los que os apetezca leer un libro en el que se cuenta la relación entre un padre y un hijo a base de diálogos.
A los que os interesen las novelas en las que se habla de cosas que nos pueden pasar a todos, de la enfermedad o también del proceso de madurar.
Ritmo de lectura
Rápido.
¿Leerías algo más del autor?
Me ha encantado este libro, así que miraré qué otros títulos tienen el autor. Aunque sé que tiene muchas novelas negras y no es ese un género que me suela interesar.