Sinopsis
La única comedia conservada de María de Zayas, de fecha incierta y al parecer nunca representada, es una historia llena de enredos, donde la mayor traición y la que exige venganza es la que se produce entre amigas.
¿Por qué me decidí a leerlo?
Porque para el reto Todos los clásicos grandes y pequeños de Las inquilinas de Netherfield tenía que leer un «clásico de no ficción / poesía / obra de teatro» (nivel 4). Tenía claro que quería que fuera teatro, y, como no conocía nada de la obra de María de Zayas (hasta hace poco ni sabía que era una reconocida autora del Siglo de Oro español, más tarde olvidada), decidí leer esta obra de teatro suya.
¿Mereció la pena?
Sí, me ha gustado leer esta comedia de enredos, con muchos amores y amistades rotas y nuevas. Y mucho más moderna de lo que podría pensarse. Se cree que fue escrita entre 1618 y 1620 (y por lo menos es de antes de 1632), pero algunas situaciones casi podrían suceder en el siglo XX o incluso el XXI. El lenguaje sí que está claro que es muy antiguo (aunque está editado para que se entienda un poco mejor), con expresiones que ya no se usan, y eso me hacía sentir que había detalles que se me escapaban. Y me hubiera gustado verla representada, porque ayudaría a saber qué está pasando realmente (y porque hay un momento en el que dos personajes fingen ser otras personas, y solo con el texto no quedaba tan claro el efecto). Algunas escenas tenían bastante humor, pero, además, algo que me hacía mucha gracia era lo de ponerse a hablar en un aparte, y que supuestamente no lo escuchen el resto de los personajes. En teatro queda muy bien, para hacer cómplices de los pensamientos secretos al público, pero en la vida real evidentemente parecería bastante raro.
El amor es fundamental en esta obra, y, como se indica en el título, también la amistad. Ya desde el principio se empieza a notar que para algunos de los personajes más que una historia con triángulos amorosos es un caso claro de poliamor. Una de las mujeres concretamente ama a todos los que pasan por sus ojos, o, mejor dicho, por sus brazos. Aunque tiene un preferido, se pone muy celosa si cualquiera de sus amados ya no quiere seguir con ella. Y otro de los personajes es el típico donjuán, que tampoco parece que se aclare mucho con sus sentimientos (aunque más bien parecía que carecía de ellos). Otro dice claramente que las mujeres castas son un aburrimiento. Eso me hizo creer por un momento que no habría problemas con la honra de las mujeres, pero no, los hay. Tampoco es de extrañar que hicieran diferencias entre lo que se espera de un hombre o de una mujer, si hoy en día se sigue juzgando más duramente a las mujeres en temas sexuales. Una de las protagonistas, que ya había tenido una vida algo dura, cree que ya no tiene “valor” porque se dejó llevar y durmió con su amado como si fueran esposos. Y, claro, el «esposo» no tiene el mismo problema y no parece recordar su promesa de matrimonio.
Me asombraba el amor repentino, pero también la amistad repentina, a primera vista. Por ejemplo, la primera vez que se encuentran Marcia y Laura. Si no fuera porque aseguran estar enamoradas de dos de los caballeros, podría creerse que Marcia y Laura se han enamorado la una de la otra nada más verse, por lo bellas y maravillosas que son… Hasta dicen que si fueran hombres estarían juntas (así que como no lo son, solo les queda la amistad). Pero reconozco que me encantó que se valorara tanto la amistad entre mujeres. En esta historia ellas estrechan sus lazos, y demuestran lo importantes que son las amistades femeninas y ayudarse entre ellas. Y entendía perfectamente que se sintieran traicionadas o que traicionaban a su amiga por liarse con su enamorado. Pero, aun así, me parecía peor la actitud del donjuán que la de la amiga traidora. Ellos van bastante a su aire, así que poco se ayudan, pero tampoco se reprochan mucho esos cambios repentinos de parejas.
El final me hubiera gustado un poco distinto para algún que otro personaje (porque alguno recibe peor escarmiento que otro, habiendo hecho prácticamente lo mismo), pero si está basada en «hechos reales», quién soy yo para querer otro final:
Con esto, senado ilustre,
justo será que fin tenga
La traición en la amistad,
historia tan verdadera
que no ha un año en la corte
subcedió como se cuenta.
(En la página web de la Biblioteca Virtual de Miguel de Cervantes se puede leer en versión web (o html) la obra de teatro, con la edición de Teresa Ferrer Valls, que es la versión que he leído yo, y también una versión a cargo de Mariano de Paco Serrano, que está en PDF. Esta obra adaptada es más corta y fusiona personajes (yo pensé que era un error, pero al parecer no, los cambios son licencias del autor). Concretamente me fijé en que Don Juan de repente es casi ubicuo, porque no solo tiene sus problemas sentimentales propios de la obra original, también es el confidente de Liseo y Laura… Hasta pensé en leer esta versión por estar en PDF, pero me pareció demasiado lío, y preferí leer el estudio crítico de Susan Paun de García, Traición en la amistad (en la misma página web), para entender mejor la obra original.)
¿A quién se lo recomiendo?
A quien le gusten las obras de teatro llenas de enredos y quiera conocer a una autora del Siglo de Oro español que no debería ser tan desconocida.
Ritmo de lectura
Bastante rápido. La leí en tres días, como las tres jornadas en las que se desarrolla esta obra de teatro. Y no sé muy bien por qué, pero desde los primeros versos me salió natural leer en voz alta (y en algunos momentos creo que hasta se podría decir que estaba declamando), y así entendí mejor los sentimientos de los personajes…
¿Leerías algo más de la autora?
Sí, me apetece conocer sus Novelas amorosas y ejemplares (que al parecer quiso llamar Honesto y entretenido sarao), y Parte segunda del sarao y entretenimiento honesto (desengaños amorosos), porque eso del sarao suena bastante bien…