Sinopsis

Bécquer compuso ochenta y cuatro Rimas en toda su vida. Por ellas figura en la historia de la literatura. Son composiciones breves, efectivas y hermosas sobre amores, desamores y soledades.

¿Por qué me decidí a leerlo?

Por el reto de lectura 2019. Tenía que leer un libro de un género que no hubiera leído nunca, pero es que realmente no hay ninguno que no haya leído (si me he leído hasta manuales de instrucciones). Así que me decidí por algo que casi nunca leo: poesía. Y pensé que era buen momento para leerme todas las rimas de Bécquer.

¿Mereció la pena?

Las rimas de Bécquer sí merecen la pena. Incluso para una persona como yo, que no está acostumbrada a leer poemas (o rimas). Me ha resultado ameno, y me gusta el ritmo que tienen sus rimas al leerlas. Aunque me he sentido un poco frustrada con algunas, porque me parecían microrrelatos y quería saber más sobre qué pasaba después o qué pasó realmente. Me ha llamado la atención esa obsesión por los ojos, y por las lágrimas, y también que él mismo reconozca que llora (que es algo humano, por supuesto, pero como siempre se asocia a las mujeres eso de llorar…). He notado que compartía algunos de sus sentimientos, y por eso me sentía cercana a él, pero en otros me sentía más alejada porque no terminaba de comprenderle.

En general me han gustado más sus rimas sobre la vejez, la muerte, el pasado o el futuro que las dedicadas al amor. Puede que las amorosas me parecieran un poco superficiales, en parte porque tuvo varias amadas (se nota que son distintas por los ojos, que van cambiando de color…) y parece que era pura atracción física (aunque con alguna compartía momentos de lectura, como deja claro en la rima XXIX). En la rima LXI se preguntaba quién le acompañaría en sus últimas horas. Y también que quién se acordará de él, porque el mundo seguirá, aunque él ya no esté. Eso me llamó mucho la atención, porque precisamente de él se acuerda mucha gente tantos años después…

Lo malo ha sido el libro que he leído, de una colección editada por un periódico, y que probablemente era un regalo (o muy barato). No me di cuenta de que faltaban rimas hasta empezar a leerlo, así que busqué las que faltaban por internet (después de todo ya son de dominio público). Las encontré en la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes, pero seguían faltando, porque en esa versión solo hay 76 (que son las que aparecieron en la primera edición). Así que lo de leerlas todas todavía no lo he conseguido (ni siquiera me ha quedado claro cuántas son realmente).

También me ha servido para comprobar que algunas de sus rimas, que he visto que la gente comparte por las redes sociales, son realmente suyas. Muchas veces se viraliza una frase, crees que de verdad la dijo o escribió alguien determinado, y luego descubres que no, que es falsa. Si la frase es buena, da igual quién la haya escrito, pero para mí es un pequeño engaño. Me gusta que las fuentes sean correctas, aunque a veces sea difícil comprobarlas. Pero creo que todas las de Bécquer que he visto sí que las escribió él. Algunas ya las conocía, de mis tiempos de estudiante, como la XXIII:

Por una mirada, un mundo;
por una sonrisa, un cielo;
por un beso… ¡yo no sé
qué te diera por un beso!

O la LIII, que hasta me sabía el principio desde hace años, pero que no estaba en el libro que me he leído:

Volverán las oscuras golondrinas
en tu balcón sus nidos a colgar…

¿A quién se lo recomiendo?

A las personas que no las hayan leído, que probablemente son pocas. Y, aunque no soy la mejor para dar consejos sobre poesía, creo que es mejor leer poemas en papel y no en digital. Me da la sensación de que se pierde algo (o eso me ha pasado a mí al leer en pantalla, que sentía que perdían un poco de esa musicalidad…).

Ritmo de lectura

Rápido. Probablemente demasiado deprisa, porque según creo los poemas se tienen que leer despacio, asimilando las palabras y la rima, dejándote llevar por lo que te hacen sentir… Pero me temo que soy incapaz de leer así.

¿Leerías algo más del autor?

Sí, leeré sus Leyendas. O puede que sea realmente una relectura, porque estoy segura de que algunas ya las he leído, como Los ojos verdes, pero hace tanto tiempo que no sé si fueron todas.