Sinopsis
No volverás a hacerme daño.
Franky Pierson tiene 14 años y pronto va a descubrir que detrás de una sonrisa, de un abrazo un poco más fuerte de lo normal o de unos ojos verdes, puede ocultarse el más terrible de los monstruos, capaz de pensar, de decir, y de hacer cualquier cosa.
Los monstruos, cuando las cosas no son como ellos querrían, despiertan de su letargo. Y puede pasar cualquier cosa, ¿verdad?
Para Franky, su padre es perfecto, un famoso y admirado presentador de televisión cuya eterna sonrisa encandila a todo el mundo. Pero al otro lado de las cámaras, la realidad es distinta. Tras esa máscara también existe un hombre obsesionado por dominar a su mujer y a sus hijas, aparentando ante su público que tiene una familia ideal. Y, de repente, algo hace reaccionar a Franky.
¿Por qué me decidí a leerlo?
Después de haber leído Carthage y Rey de Picas de Joyce Carol Oates tenía decidido leer más libros de esta autora. Así que al ver que este era suyo, me leí la sinopsis un poco por encima y decidí leerlo. Luego me di cuenta de que es un libro de literatura juvenil.
¿Mereció la pena?
Sí, me ha gustado, y por varias razones. Me ha resultado entretenido, aunque hubiera preferido que el desenlace no fuera tan duro. Y me ha encantado su forma de narrar. También he podido seguir comprobando que esta autora es capaz de meterse en la piel de personajes muy diversos (en sus otros libros), y que resulten todos creíbles. En este caso pone voz a Franky, una chica de catorce años, que empieza a darse cuenta de que su mundo familiar no es tan ideal como ella creía. Y que ella misma está cambiando. Tiene que aprender a moverse en el mundo de los adultos, pero todavía le siguen resultando bastante incomprensibles…
Franky vive con sus padres y su hermana pequeña, Sam, en una casa construida para aparentar. También tiene un hermano mayor, Todd, que no suele vivir con ellos, hijo del matrimonio anterior del padre. Franky adora a su padre, que fue un jugador de fútbol americano de éxito y que ahora triunfa como locutor deportivo de televisión. Con su madre empieza a tener conflictos, y se pone de parte de su padre, aunque empieza a notar algo raro en él… Como Franky lo cuenta en primera persona, sabemos lo que le pasa, lo que descubre y lo que piensa a lo largo de varios meses.
Una de las cosas que más me sorprendió fue quién era el monstruo de los ojos verdes. Después de leer la sinopsis estaba convencida de que sería el padre, pero no. Es ella misma, que siente que hay un «monstruo» que le impulsa a rebelarse, a actuar frente a lo que le parece injusto (me encantó el momento de liberar animales) o a no quedarse callada. Por un lado, parecía la típica rebeldía de una adolescente, como no querer que su madre la llame Francesca. Pero por otro, vamos descubriendo que es mucho más que eso.
En algunos momentos sentía angustia por el suspense que mantiene la autora por su forma de contar lo que sucede, pero también por pensar que Franky no se daba cuenta de lo que estaba pasando realmente. Yo como adulta sí que notaba que el padre era controlador y manipulador, pero su amor de hija o cómo maneja la situación su madre para proteger a sus hijas (y no ir en contra del hombre al que sigue queriendo) hacen que tarde en entenderlo. Y también llevé mal el sufrimiento de la pequeña Sam, que no es capaz de entender por qué su madre tiene que estar alejada de ella.
Es una historia dura, no solo por tratar un tema como el maltrato. También tiene otros como el sexo no consentido (al principio hay una escena que me pareció horrible, pero por desgracia muy real); el deseo de aparentar de los famosos; las relaciones en las que se sigue queriendo al que te hace daño; la manipulación de los hijos (o de cualquier otra persona); el dilema de elegir entre el padre o la madre; lo difícil que es entender a los adultos; lo malo que es consentir todo a los hijos; qué pueden hacer o qué hacen otras personas cuando se dan cuenta de que existe maltrato; o la impotencia como madre (o padre) al ver que tu hija se aleja de ti y no sabes cómo remediarlo…
¿A quién se lo recomiendo?
A los que les guste la autora, porque merece la pena aunque sea un libro juvenil. Y a los que quieran conocer cómo vive el maltrato una hija adolescente. Va dirigido a los adolescentes, pero creo que es un libro que debería comentarse con adultos, que a ser posible también se lo hayan leído (y entiendan lo que es el maltrato psicológico y físico). Creo que si me lo hubiera leído de adolescente no habría captado algunos de los matices (como le pasa a la protagonista) y hubiera tenido muchas dudas y preguntas que hacer.
Ritmo de lectura
Bastante rápido. No es muy largo (192 páginas) y los capítulos son cortos, que a mí me hacen ir más deprisa. Y el suspense que le da la autora también ayuda a no querer dejar de leer, incluso cuando ya sabemos qué está pasando…
¿Leerías algo más de la autora?
Sí, por ahora todos los libros que he leído de ella me han gustado. Así que sigo con ganas de leer más de ella.