Adeline Virginia Stephen, tras casarse Virginia Woolf, nació el 25 de enero de 1882 en Londres. Se educó en casa, en la que se recibieron muchas visitas de escritores como Henry James, Thomas Hardy, Alfred Tennyson… Sus recuerdos de infancia más memorables fueron las vacaciones que pasó en St. Ives, Cornualles. DesdeTalland House, la casa veraniega familiar, tenía vistas a la playa de Porthminster y al faro de Godrevy, que le inspiró en varias de sus obras, y sobre todo en Al faro. En 1915 publicó su primera novela, Fin de viaje, una sátira sobre la época eduardiana. En un principio iba a llamarse Melymbrosia, pero lo cambió y también hizo otros muchos cambios en el borrador original. Durante toda su vida sufrió depresiones (hoy en día se hubiera diagnosticado como trastorno bipolar), que influyeron en su vida social, pero no en su producción literaria, con obras como Orlando, La señora Dalloway, Las olas, Una habitación propia…

Más información:
https://es.wikipedia.org/wiki/Virginia_Woolf
Efeméride 26 de marzo de 1915: se publicó Fin de viaje.
Efeméride 14 de mayo de 1925: se publicó La señora Dalloway.
Efeméride 5 de mayo de 1927: se publicó Al faro.
Efeméride 24 de octubre de 1929: se publicó Una habitación propia.
Reseñas:
Frases:
Toda una vida no bastaba, era demasiado corta para, ahora que uno había adquirido la capacidad de hacerlo, extraer el pleno aroma; para sacar cada onza de placer, cada matiz de significado. (La señora Dalloway)
Era como si el agua se llevara flotando los pensamientos que se hubieran estancado en la tierra seca, y les pusiera velas, y otorgara a los cuerpos alguna suerte de alivio físico. (Al faro)
Compartían cierta hilaridad, provocada por el movimiento de las olas; después era el nítido curso de un velero lo que provocaba la hilaridad: describía su trayecto una curva en la bahía, se detenía, se estremecía, amaba las velas; después, como si obedecieran una intuición propia para completar el cuadro, tras ese movimiento elegante, miraban a las lejanas dunas, y, en lugar de alegría, descendía sobre ellos cierta tristeza… (Al faro)
En las calles de Londres, la belleza pasa desapercibida, pero la excentricidad paga un elevado tributo. Es preferible que la estatura, porte y físico sean normales, con tendencia a lo vulgar; y en cuanto a la indumentaria, conviene que no llame la atención bajo ningún concepto. (Fin de viaje)
El manuscrito, que yacía sobre su corazón, empezó a latir y a agitarse, como si estuviera vivo, y (rasgo más raro e indicio de la fina simpatía que había entre los dos) a Orlando le bastó inclinarse para entender lo que decía. Quería que lo leyeran. Exigía que lo leyeran. (Orlando)
Espero que encontréis, a tuertas o a derechas, bastante dinero para viajar y holgar, para contemplar el futuro o el pasado del mundo, soñar leyendo libros y rezagaros en las esquinas, y hundir hondo la caña del pensamiento en la corriente. (Una habitación propia)
Saqueo las bibliotecas públicas y las encuentro llenas de tesoros hundidos.