Esta reflexión es de Ray Bradbury, y él mismo la contesta:
Sin bibliotecas, ¿qué tenemos? Ni pasado ni futuro.
Las bibliotecas son un lugar donde se recoge la memoria del pueblo y su identidad. Un caso claro de tratar de destruir la cultura de un pueblo fue el bombardeo por el ejército serbio de la Biblioteca Nacional de Bosnia-Herzegovina en Sarajevo, Vijecnica, el 25 de agosto de 1992. Dos millones de libros, setecientos incunables y miles de manuscritos se perdieron. La biblioteca volvió a abrir en 2014.