Sinopsis
En 1999 centenares de jóvenes pasaron por las audiciones para interpretar a Harry Potter. Entre los dos candidatos que llegaron hasta el final, Daniel Radcliffe fue elegido por tener, según la directora del casting, «ese algo extra». Al leer estas declaraciones, David Foenkinos empatizó de inmediato con el chico que no tenía ese toque extra: el número dos. Esta novela narra su historia.
La vida de Martin Hill, un chico con padres divorciados y gafas negras y redondas, da un vuelco cuando acude por azar a la productora londinense en la que trabaja su padre el mismo día en que pasa por ahí David Heyman, inmerso en la búsqueda del actor que encarnará al pequeño mago. Tras ser descartado, Martin irá cayendo en sucesivas depresiones con cada nueva entrega de los libros y las películas. A su alrededor, todo le recuerda el éxito de su rival y poco a poco, en lugar de disfrutar de la vida de Radcliffe, la suya propia empieza a parecerse a la del atormentado personaje de ficción. ¿Podrá sobreponerse a esa mancha en su destino y hacer del fracaso una fuerza?
¿Por qué me decidí a leerlo?
Por muchas razones. Porque me lo recomendaron, porque hace poco había leído otra novela del autor, La delicadeza, y me había gustado mucho. Y porque habla sobre Harry Potter, que me requeteencantaba. Cuando se salieron los libros los leía con la misma ilusión que mis hijos.
¿Mereció la pena?
Me ha gustado mucho esta novela, en la que el tema principal es el fracaso, en este caso del chico que quedó segundo en la selección del protagonista para las películas de Harry Potter. Es decir, el actor que se quedó sin ser famoso, y lo que más me ha gustado es la empatía que hace sentir el autor por esta persona. Podría caer fatal, porque es un amargado por no haber conseguido el puesto, pero, por el contrario, hace que caiga muy bien. Y, a veces, he llegado a preguntarme qué era verdad y qué no lo era en esta novela inventada sobre este chico real.
Un gran homenaje a Harry Potter y a todos aquellos niños y adultos que disfrutamos tanto con él. Pero desde una posición muy distinta a la que podría haber sido la más natural, que sería contar la historia del famoso actor que lo interpretó. Sin embargo, el autor hace ese homenaje poniendo el acento en el otro chico, el que no lo consiguió y sufre cada vez que ve los libros o las camisetas, o se entera de que se estrena nueva película. Y no solamente de niño, también en su edad adulta. Es un niño y un adulto reservado, solitario, siempre con miedo y sufriendo mucho. Y otra cosa que me ha encantado es el precioso final.
Un libro que habla sobre los fracasos, que todo el mundo tiene en la vida, no se libra nadie. Pero también habla sobre los fracasados. Que no son todos, porque algunos fracasan y lo vuelven a intentar una y otra vez, y jamás se sienten fracasados. Pero la inmensa mayoría de las personas sí que llevan ese fantasma del fracaso dentro de ellos, son esos eternos sufridores incapaces de vivir y que solamente sobreviven.
Mezclando ficción con realidad, cuenta los diez años de vorágine que hubo con esta saga de libros y también de sus películas. Con esas colas larguísimas en las librerías, cuando salía cada libro, y para entrar en los cines. Y así, cuando el protagonista de la historia parece que empieza a levantar cabeza, sale otro libro y otra peli, y vuelve a caer, una y otra vez, en este mundo donde se le da tanta importancia al éxito. Por eso creo que me ha gustado tanto esta novela, porque no habla del éxito, sino del fracaso.
¿A quién se lo recomiendo?
A quien le gusten las novelas sobre el fracaso.
A quien le encanten los libros de Harry Potter.
A quien le guste el autor, porque hace muy amenas todas las novelas, y a la vez hace buena crítica social.
Ritmo de lectura
Rapidísimo.
¿Leerías algo más del autor?
He leído ya dos novelas suyas y quiero seguir leyendo más.