Sinopsis

La historia de una mujer notable y el misterio y el suspense que la esperan en los magníficos pasillos de Dragonwyck. Miranda Wells tiene dieciocho años y es la hija de un granjero en la América profunda. Está harta de batir mantequilla, de quitar las malas hierbas del jardín y de que la pretendan jóvenes granjeros sin gracia. Por eso, al recibir la invitación de un pariente lejano en Nueva York, Nicholas Van Ryn, para que se mude a su casa, se entusiasma y lucha por convencer a su madre y, sobre todo, a su padre, para que le permitan ir. La oportunidad de vivir en Dragonwyck, una gran mansión, el magnetismo que el misterioso Nicholas ejerce sobre ella y su modo de vida le parecen un sueño. Sin embargo, bajo las torres góticas de Dragonwyck, sus jardines en flor y las granjas de los arrendatarios se esconden terribles secretos: la riqueza de los que tienen mucho y la miseria de los que no tienen nada, la lucha entre la libertad y las costumbres feudales, y el amor, la violencia y la oscuridad que a veces se esconden tras una apariencia bien distinta.

¿Por qué me decidí a leerlo?

Buscaba una novela de misterio y esta novela está catalogada en eBiblio como novela negra y de suspense. Cuando vi la imagen de la cubierta me llamó la atención, porque parecía una historia de época y el título me parecía tan raro… Por la sinopsis pensé también que sería una historia interesante. Así que, como quería misterio, me gustan las historias de otras épocas (y más con algo de crítica social) y quería saber qué significaba Dragonwyck, no tuve más remedio que leerlo.

¿Mereció la pena?

Pues sí, porque me ha gustado y me ha sorprendido, pero calificarla de misterio, como pone en la cubierta, me parece un poco exagerado. Y precisamente la pequeña parte de “misterio” me parecía bastante predecible, también porque una de las claves de esa historia ya la sabía desde hace un tiempo. Podría ser gótica (la editorial también la incluye en ese género), porque la mayor parte de la historia transcurre en una especie de castillo (neogótico), hay alguna muerte, y puede que algún espíritu ronde por allí… Aunque para mí, es sobre todo una historia que tiene todos los ingredientes para una novela romántica: una joven pobre que queda prendada de un rico y apuesto hombre de mundo. El problema no es solo que él esté casado, aunque su matrimonio no parece que pase por un buen momento, sino que él mismo tiene comportamientos desconcertantes. Pero a partir de ahí, la historia da un giro y comienza una historia distinta. Creo que es mejor que no cuente nada, por no destripar la novela. Y que a quien le apetezca leer este libro descubra todo lo que pasa mientras acompaña a Miranda, desde que sale de su casa queriendo una vida mejor, hasta que igual se arrepiente de haberla deseado.

El personaje de Miranda me gustó mucho. A veces no estaba nada de acuerdo con ella, como en sus ganas de ser rica (o por lo menos no tan pobre) y dejarse deslumbrar por los lujos. Pero me gustaba mucho su forma de ser, con sus virtudes y defectos. En algunos momentos no me gustaba tanto, pero mucho se debía a la situación que le toca vivir, y me parecía bastante comprensible que se comportara así. Es un poco rebelde ante el futuro predecible de cualquier mujer de su clase social, sintiendo que no encaja en su familia, pero al mismo tiempo queriendo mucho a su madre, a sus hermanos y a su estricto padre. Tampoco puede evitar ser algo contestona, cuando todo el mundo esperaría que estuviera callada. A veces le pueden los prejuicios, pero demuestra tener buen corazón. Por ejemplo, ayudando a Peggy, otro personaje que me gustó mucho. Nicholas al principio me pareció un buen personaje, con claroscuros, pero luego algunos de sus comportamientos me parecían algo exagerados. Jeff, un médico que defiende a las clases bajas frente a gente que se cree tan superior como Nicholas, me hubiera gustado que fuera un poco diferente para que me cayera algo mejor. Pero nadie es perfecto. El resto de los personajes son bastante secundarios, aunque tienen su importancia en la trama…

La nota de la autora del principio explica que la idea de la novela surgió de la noticia de un periódico, el New York Herald, de 1849 (la novela es de 1944). También cuenta que existió una mansión como la de la novela, y que las costumbres y conflictos que aparecen se basan en hechos reales de la época. Precisamente esos conflictos de las clases altas y bajas me sorprendieron mucho, porque no conocía esa parte concreta de la Historia de Estados Unidos. Se menciona la guerra con México, la masacre de Astor Place, el desarrollo de los barcos de vapor por el río Hudson… Y los últimos coletazos de una especie de feudalismo, que es la parte a la que me refiero como sorprendente. También me desconcertó que, tras tantos años desde la Independencia de Gran Bretaña, todavía hubiera tanta influencia británica, sobre todo en las clases altas. O que hubiera importantes familias de origen holandés queriendo no perder sus privilegios. Otros temas más atemporales que trata son el maltrato, los amores y desamores, el despecho, el amor (o no) hacia los hijos, la importancia de las apariencias…

¿A quién se lo recomiendo?

A quien quiera leer una novela romántica atípica, con un poco de suspense, otro poco de crítica social…

Ritmo de lectura

Rápido. Aunque no tiene gran suspense, sí que me tuvo enganchada por querer saber cómo acabaría todo.

¿Leerías algo más de la autora?

Creo que sí, pero no sé ni qué tiene publicado en castellano. También tengo algo de curiosidad por la película, El castillo de Dragonwyck (1946).