Sinopsis

Igor, un joven y exitoso dramaturgo, se encuentra aislado en un pueblo perdido entre Polonia y Bielorrusia. Allí se encuentra con Sońka, una anciana que únicamente posee una vaca y que lo acoge en su casa y le explica su trágica vida: una historia perdida en una de las guerras más terribles; una historia de odio, de explotación y de humillación, pero sobre todo de deseo y de amor prohibido, poderoso, inconcebible. Igor entiende de inmediato que se encuentra ante un material inigualable por honesto y auténtico para su nueva producción teatral. Poco a poco, el lector se adentra en el relato y se da cuenta de que el verdadero narrador de la historia que está leyendo no es Sońka, sino Igor, que la modifica, intercala notas sobre cómo adaptarla e incluso fragmentos de la obra de teatro que escribe inspirada en ella. El lector desconfía; es lo que necesita para enfrentarse a lo que vendrá.

¿Por qué me decidí a leerlo?

Era una recomendación personal de una conocida, con la que ya he coincidido en varios libros que nos han gustado a las dos. Me comentó que seguramente me gustaría mucho, porque creía que era el tipo de literatura que a mí me podía interesar. Y me apeteció mucho leer algo de literatura polaca, de la que tampoco leo muy a menudo.

¿Mereció la pena?

Me ha parecido una joyita esta novela, que nos cuenta una historia tremenda. Los personajes principales son una anciana campesina y un joven y famoso dramaturgo, que coinciden en la casa de ella porque a él se le estropea el coche. Y ella le cuenta su trágica historia de guerra y amor, pero también de odio, con la que el dramaturgo compone una obra de teatro que muestra al público.

Dividida en capítulos que se mezclan entre las partes contadas por la anciana, de una forma muy triste y con un estilo rústico y antiguo, y, por otro lado, la parte de la representación de la obra. Esta parte está contada de una forma más moderna e incluso con mucha ironía, adornándolo con una parte muy teatral y con ideas del propio dramaturgo. A veces no sabes muy bien quién lo está contando, si la anciana o el joven, y si de verdad pasó o simplemente es una invención dentro de la obra de teatro. Pero eso hace aún más atractivo este libro.

Es una historia que, a pesar de lo triste que es, nos mantiene enganchados no solo por querer saber más, sino por la forma tan maravillosa y bella que tiene el autor de contarla. Parece mentira que sea así cuando se habla de guerra, de supervivencia, de tener que luchar todos los días para poder seguir adelante. Y todo esto contado por una anciana que ha llegado a la vejez viviendo así, con tristeza y sin ningún tipo de esperanza, pero que ahora siente paz contándoselo a este joven desconocido que tiene que pernoctar en su casa.

¿A quién se lo recomiendo?

A los que os gusten los libros donde se mezcla la narración con el teatro, la vida real con la representación teatral.

A los que os gusten las tragedias, y no precisamente con final feliz, porque, aunque se habla de esperanza, se habla de pasado, pero sin futuro. Hay mucho dolor y muerte.

Ritmo de lectura

Rápido.

¿Leerías algo más del autor?

Me ha gustado mucho la forma de escribir del autor, con una prosa muy fresca y poética, así que claro que quiero leer más de él.