Sinopsis
“Yo fui educado a la antigua, y nunca creí que me fueran a ordenar un día que matara a una mujer. A las mujeres no se las toca, no se les pega, no se les hace daño.”
Dos hombres, uno en la ficción y otro en la realidad, tuvieron la oportunidad de matar a Hitler antes de que este desencadenara la Segunda Guerra Mundial. A partir de este hecho, Javier Marías explora el envés del «No matarás». Si esos hombres quizá debieron disparar contra el Führer, ¿cabe la posibilidad de hacerlo contra alguien más? Como dice el narrador de Tomás Nevinson, “ya se ve que matar no es tan extremo ni tan difícil e injusto si se sabe a quién”.
Tomás Nevinson, marido de Berta Isla, cae en la tentación de volver a los Servicios Secretos tras haber estado fuera, y se le propone ir a una ciudad del noroeste para identificar a una persona, medio española y medio norirlandesa, que participó en atentados del IRA y de ETA diez años atrás. Estamos en 1997. El encargo lleva el sello de su ambiguo ex-jefe Bertram Tupra, que ya, mediante un engaño, había condicionado su vida anterior.
¿Por qué me decidí a leerlo?
Javier Marías es de mis autores favoritos, he leído toda su obra, y de momento, si no cambia el estilo, pienso seguir leyendo todo lo que publique. Además, esta novela tiene que ver mucho con la anterior, Berta Isla, que me encantó. Es como una continuación sin serlo, son los mismos personajes que ya conocía.
¿Mereció la pena?
Yo creo que hay autores con los que no puedo ser objetiva, son autores que me gustan mucho y, aunque sus novelas alguna vez sean más flojas, siempre les busco el punto positivo. Pero en este caso no es que me encante el autor, simplemente es que es una gran novela, es Marías en estado puro. Es incluso mejor que la anterior, Berta Isla, con la que tiene mucho en común porque son los mismos personajes. Y que, aunque se puedan leer sin orden, yo os recomiendo que las leáis en el orden en el que se han publicado, porque la historia es diferente, pero algunas cosas quedarán más claras.
Creo que Marías nos ha querido enseñar cómo, por evitar un mal mayor, se deben hacer cosas que no nos gustan o no nos parecen éticas, pero que en frío todos creemos que las haríamos, y cuando las tenemos que hacer surgen las dudas. Y podemos no llegar a ejecutarlas. Esto nos lo cuenta desde varias perspectivas, desde la de la persona que pudo matar a Hitler y le pareció tan ridículo que no pensó que sería tan dañino, o desde el punto de vista del protagonista, que podría matar a una terrorista que ya está bañada en sangre, pero duda por si no es ella la que planeó los horribles atentados.
He dicho que es Javier Marías en estado puro, como en todas sus novelas vuelve a contarnos una historia sencilla, donde ocurren pocas cosas. Pero es capaz de mantenernos expectantes durante casi setecientas páginas, no solo hablándonos de sus personajes, también nos habla de literatura, cine, historia antigua y contemporánea… Y a mí personalmente no me aburre. Por el contrario, estoy deseando llegar al nudo de la novela, pero me entretiene mucho que le dé mil vueltas al asunto. Aparte de las maravillosas reflexiones que hace sobre la historia y la vida en general.
Durante esas setecientas páginas se nos habla del bien y del mal, y de lo mucho que pesa la culpa, pero no nos engañemos, aunque habla de ETA y del IRA no nos cuenta nada sobre las dos organizaciones o sobre la lucha antiterrorista. El autor nos lleva más hacia dilemas morales. Y, aunque en esta novela yo he echado de menos algún capítulo de los hilarantes del autor, la novela no está exenta de humor, y en algunos momentos de frivolidad muy elegante, que son dos notas características en la forma de escribir de Marías.
¿A quién se lo recomiendo?
A los que como yo no sean nada objetivos con este autor, porque tienen que gustarte mucho los libros que no son solo para entretener, te tienen que gustar mucho los libros que alrededor de una historia tejen mil más.
Ritmo de lectura
A un ritmo normal, es un autor con el que de vez en cuando debes parar y reflexionar sobre lo que te cuenta.
¿Leerías algo más del autor?
Sí, claro, el estilo tan personal de Javier Marías me encanta.