Kristjan Jaak Peterson nació el 14 de marzo de 1801 en Riga, Imperio ruso (actualmente Letonia). En la universidad de Tartu, donde solo se hablaba alemán, fue el único alumno que reconoció su origen estonio y contribuyó al «Despertar Nacional Estonio». Se vestía de forma extravagante, llevando parte del traje tradicional estonio. Se le daban muy bien los idiomas, antiguos y modernos, por lo que escribió tratados lingüísticos. Murió a los 21 años de tuberculosis, y uno de los pocos proyectos que pudo completar fue la versión alemana de Mythologia Fennica, de Kristfrid Ganander, un diccionario de nombres y términos de la mitología finlandesa. Tuvo muchos lectores estonios y se convirtió en inspiración para la literatura nacional estonia que comenzaba. Escribió poemas en alemán y en estonio, publicados de forma póstuma. Unas líneas de su poema Kuu (luna) están consideradas como una reivindicación del derecho de emancipación del idioma estonio (¿No puede la lengua de esta nación, / en el viento del cantar, / ascender al cielo / buscar la eternidad?). Y por eso el 14 de marzo se celebra el Día de la Lengua Materna en Estonia.
