Frans Eemil Sillanpää nació el 16 de septiembre de 1888 en Hämeenkyrö, Finlandia. Sus padres eran campesinos, que pasaron muchas penurias, y de todos sus hijos solo él sobrevivió, el último en nacer. Empezó a estudiar en una escuela móvil para hijos de granjeros, hasta que empezó a destacar como estudiante, y pudo ir a una escuela normal. Para poder enviarle a Tampere a estudiar secundaria sus padres tuvieron que sacrificarse mucho durante cinco años. Él se mantuvo solo durante otros tres años y en 1908 empezó a estudiar en la Universidad de Helsinki, con dinero prestado. En 1913 regresó a su pueblo, y decidió dedicarse solo a la literatura. Con un seudónimo mandó un relato corto al periódico Uusi Suometar, aunque no creía que se lo publicaran. Siguió publicando relatos, y enseguida en Helsinki descubrieron quién se ocultaba tras el seudónimo. Un editor le ofreció un adelanto a cambio de que escribiera su primer libro, La vida y el sol. Después publicaría otras novelas y un libro de memorias. Recibió el Premio Nobel de Literatura en 1939, convirtiéndose en el primer finlandés en recibirlo.
Más información:
https://es.wikipedia.org/wiki/Frans_Eemil_Sillanpää
Frases:
Su soledad era tan solo aparente, pues tenía siempre unos compañeros amables, privados de la palabra, es verdad, pero tanto más devotos. El sol, que alegraba la habitación, y el piar de las golondrinas, que tenían su nido en el alero, proporcionaban a sus sentidos afinados unos pensamientos luminosos y felices. (Silja)