Sinopsis
Adam y Ulrika, un matrimonio normal, viven con su hija Stella, de dieciocho años, en una zona agradable en las afueras de Lund. En apariencia, su vida es perfecta… hasta que un día dicha ilusión se trunca de raíz cuando Stella es arrestada por haber asesinado brutalmente a un hombre casi quince años mayor que ella. Su padre, un respetado pastor de la iglesia sueca, y su madre, una conocida abogada defensora criminal, deberán replantearse su paradigma ético mientras la defienden e intentan comprender por qué es la principal sospechosa del crimen. ¿Hasta dónde llegarán para proteger a su hija? ¿Saben realmente cómo es? Y más preocupante aún: ¿acaso se conocen el uno al otro?
¿Por qué me decidí a leerlo?
Alguien me lo recomendó en Instagram. Y cuando vi de qué trataba pensé en salir de mi zona de confort en lecturas y leer algo que tuviera en su trama un asesinato, ya que de estos temas suelo leer poco.
¿Mereció la pena?
Me ha entretenido mucho esta novela que tiene varios géneros, el familiar, el judicial y el de suspense. Y, aunque el tema de los asesinatos no es mi favorito, sí me ha gustado cómo está tratado. Porque lo importante para mí no es tanto el asesinato, sino ver cómo se habla de la paternidad y cómo cada persona la ve de una manera diferente, así como también la educación que se les da a los hijos, que en cada familia puede ser muy diferente. También trata sobre la diferencia entre generaciones, y cómo en cada familia se forma la relación con la pareja y con los hijos de formas muy diversas. Todo esto lleva a algo mucho más lejano e hipotético, que es cuando ocurre algo que se sale de la normalidad. ¿Qué somos capaces de hacer cada uno de nosotros por salvar a nuestro hijo de, por ejemplo, ir a la cárcel? ¿Seríamos capaces de saltarnos las normas y la ley? Y entonces es cuando dejamos de ser una familia normal.
Me ha gustado que esté narrado a tres voces, las de los tres integrantes de la familia, el padre, la madre y la hija. Porque así se ve todo desde tres puntos diferentes de vista, sobre la familia, las relaciones entre ellos, o con los de fuera de la familia. Es la misma historia la que cuentan los tres, pero sus versiones son muy diferentes en todo. Y así, poco a poco, van enseñando qué es lo que verdaderamente ocurrió la noche del fatídico asesinato. También muestran cómo han pasado de ser, o al menos parecer, una familia normal a ser una familia totalmente desintegrada. Además, consigue que el lector se haga muchas preguntas. Yo, más que sobre el asesinato en sí, me he preguntado cómo hubiera yo reaccionado con un caso así en mi familia. Porque es complicado tomar parte por alguno de ellos, a veces los entiendes y otras no los comprendes para nada.
Ya he comentado que el libro está contado en primera persona, a tres voces. Esto hace que se conozca a los personajes muy bien, porque cada uno de ellos lo cuenta de una manera muy intimista, haciendo ver cómo han evolucionado en la vida, juntos y por separado. Y se llega a conocer a los tres de una forma muy profunda, porque los tres se desnudan delante del lector, contando sus cosas buenas, pero también sus fantasmas, que todos ellos tienen. Por eso se puede entender mejor por qué actúan de la manera que lo hacen, aunque a veces no sea la correcta. También me ha gustado la forma de desarrollar la acción del crimen. No lo dejan nunca claro, se puede conjeturar, pero no se sabe a ciencia cierta cómo se ha llegado a la tragedia. Por eso el suspense está garantizado.
¿A quién se lo recomiendo?
A quien le guste el suspense.
A quien le gusten las novelas donde se ponen a prueba la moral, la ética. Y, sobre todo, la culpa.
A quien le gusten los libros con historias muy turbias.
A quien le gusten las novelas de crímenes con una crítica a la sociedad, a la familia, al matrimonio, a la paternidad.
Ritmo de lectura
Rápido.
¿Leerías algo más del autor?
Jamás me cierro a ningún autor.