Sinopsis
Varela de Mar es un pueblo pequeño y tranquilo. Doscientos treinta y tres habitantes. Una playa que desaparece cuando sube la marea. Un faro abandonado.
Por eso Alba no lo visita desde hace cinco años. Bueno, por eso y porque allí fue donde aprendió lo que duele el amor y la herida aún escuece.
Sin embargo, en Varela también está Pelayo, su abuelo, que ha comenzado a olvidar y que ahora la necesita. Y también los recuerdos que dejó en sus calles cuando se marchó sin mirar atrás. Y Enol. El chico de las conversaciones raras, la obsesión por las mareas y que parece haber nacido en la época equivocada.
Un regreso inesperado, un faro lleno de secretos y dos historias inacabadas que, quizá, se merecen la oportunidad de un nuevo final.
«Alba, vive el presente. Porque un día será pasado y te atormentará no haberte dado cuenta antes de que todo acaba, incluso lo que creías que era para siempre.»
¿Por qué me decidí a leerlo?
Estaba en esa larga lista de lecturas pendientes que tengo, pero ni idea de cómo llegó allí.
¿Mereció la pena?
Siempre digo que la novela romántica no me gusta, pero después de leer esta novela me queda claro que, si la novela es buena, no me importa que sea romántica. Y esta historia me ha gustado a pesar de serlo. Porque con ese título y con la historia de dos amores, uno en el pasado y otro en el presente, con historias de amores de verano entre adolescentes en el recuerdo, qué otra cosa iba a ser este libro, sino uno romántico. Así que no es que odie el género romántico, es que, cuando un tema está bien tratado y bien escrito, merece la pena leerlo.
La novela está narrada a cuatro voces, la de los cuatro protagonistas. Y una de esas voces es el Mar, porque es un personaje muy importante, y también tiene cosas que decir sobre los demás. Este recurso que ha utilizado la autora me ha gustado mucho, porque así se conoce mejor lo que piensa cada uno de los protagonistas. Como son capítulos breves, saltando de uno a otro de los personajes, hace que el libro sea muy ágil. Estos saltos temporales sirven para ir conociendo a sus personajes en el pasado y en la actualidad. Y así se convierte en una historia muy sencilla y cargada de emoción. Además, las historias de amor me han parecido muy verosímiles. Será por eso por lo que me ha gustado, porque he visto reflejadas muchas historias de antes y de ahora de una forma real.
Antes he comentado que el mar es uno de los personajes, que cuenta cosas en esta novela. Pues el faro no cuenta nada, pero también parece un personaje más, porque a su alrededor transcurren todas las historias de amor y desamor. Y es donde el abuelo muestra todo lo que empieza a olvidar. El pueblo en el que viven todos también es otro personaje, por ser el lugar en el que han trascurrido sus amores, sus decepciones, sus nuevas oportunidades. Además, allí la nieta descubre un misterio, aunque sea un gran secreto, para que no se quede allí olvidado para siempre.
¿A quién se lo recomiendo?
Sobre todo al público juvenil. Aunque lo puede leer cualquiera, pero creo que a los más jóvenes les gustará más porque esas historias, tanto del pasado como de ahora, se producen entre adolescentes. También pienso que estaría bien que, gracias a esta novela, piensen en estar más con sus familiares más mayores e indaguen en sus historias antiguas y sus secretos, porque seguro que todos guardan alguno. Además, en el libro se habla de segundas oportunidades para la vida y para el amor entre jóvenes. Así, aunque se sientan perdidos, que sepan que siempre pueden volver a encontrarse.
Ritmo de lectura
Ha sido una lectura tranquila.
¿Leerías algo más de la autora?
Nunca me cierro a ningún autor o autora.