Sinopsis
En un tiempo de miedo y sospechas ser mujer es el mayor de los riesgos. Solo ellas saben la verdad. Solo ellas pueden salvarse la una a la otra.
Fleetwood Shuttleworth tiene diecisiete años, está casada y embarazada por cuarta vez. Como señora de Gawthorpe Hall, en el condado de Lancaster, todavía no ha conseguido traer al mundo un bebé que sobreviva al parto y su esposo Richard es eso precisamente lo que más ansía: un heredero. Cuando Fleetwood descubre una carta oculta del médico que la atendió en su último embarazo, sabe que es ella quien no sobrevivirá esta vez.
Pero entonces su camino se cruza con el de Alice Gray, una jovencísima partera y curandera que le promete que la ayudará a dar a luz a un bebé sano, el heredero que todos esperan y que convertirá a Fleetwood, por fin, en auténtica señora de su la mansión y sus las tierras.
Sin embargo, el rey Jacobo I, consciente de que el condado de Lancaster se ha convertido en un nido de conspiradores, sabe que una buena manera de instaurar el orden es infundir miedo y temor entre sus habitantes. Y así arranca la caza de brujas más terrible de la historia de Inglaterra, una caza en la que cualquier joven con conocimientos médicos se vuelve sospechosa.
Conforme el juicio de las brujas de Pendle se acerca, Fleetwood y Alice saben que se necesitan la una a la otra para sobrevivir.
¿Por qué me decidí a leerlo?
Porque desde hace unos meses me he empezado a interesar por el tema de las brujas, más concretamente si eran acusadas injustamente, y por la sinopsis pensé que me podría gustar.
¿Mereció la pena?
Sí, me ha gustado mucho la novela, aunque a ratos lo he pasado mal, pensando en todo el sufrimiento que tuvieron que pasar esas mujeres. Y no solo las acusadas por brujas, muchas estaban «malditas» por el simple hecho de ser mujeres, con casi todo el poder en manos de los hombres. En algunas partes, las del juicio a las supuestas brujas, me recordó mucho a Cuentos de brujas de escritoras victorianas (1839-1920), en las partes que describen casos reales de juicios, aunque también se parece a algunos de los cuentos. El final me gustó, pero me daba la sensación de ser poco realista, pensaba que eso no podría haber pasado en la vida real… Por el apunte histórico que hace la autora me di cuenta de que no lo era tanto. Y saber qué partes eran verdad y cuáles pura imaginación hizo que me gustara mucho más el libro.
La autora se inspiró en una visita que hizo a Gawthorpe Hall, en Lancaster, desde donde se ve una colina, Pendle Hill, que se relacionó con brujas. Averiguó quién vivió allí en 1612 y con esos personajes reales, de los que prácticamente solo conocía sus nombres y algunos hechos reales, elaboró una estupenda trama fruto de su imaginación. Aparte del tema de la brujería y los juicios con pocas garantías, también se tratan temas como la función de las mujeres, que básicamente es estar en casa y parir si son de familia bien, y si son pobres, deslomarse en la casa y, a veces, trabajando fuera. También refleja las tensiones con otras mujeres, y, a veces con los hombres, cuando algunas se salen del camino establecido. Además, podemos saber un poco sobre los matrimonios concertados, incluso con niñas muy pequeñas; la ambición y el poder en la época; las supersticiones; la infidelidad y las mentiras; o la medicina practicada por médicos, parteras o curanderas. Y siempre sin cerrarse a la posibilidad de que sí que existan las brujas…
Me han gustado mucho las protagonistas. La principal es Fleetwood, que es la que cuenta la historia en primera persona. Me costó mucho acostumbrarme a su nombre, pero es real, existió una mujer de clase alta llamada Fleetwood Shuttleworth, casada con Richard Shuttleworth. Aunque no es una novela de misterio, sí que tiene una cierta intriga, por la forma que tiene la autora de narrar y porque vamos acompañando a Fleetwood en sus descubrimientos: sobre Alice, sobre su marido, o sobre Roger, todo un amigo… Me resultó muy entrañable y querida esta chiquilla, que solo tiene diecisiete años y que adora a su enorme perro, Puck. Al principio parece que ha aceptado su papel de mujer que solo sirve si trae hijos al mundo. Y como hasta ahora no ha sido capaz de tener ninguno, está decidida a encontrar la mejor partera para no perder el hijo que está esperando.
Poco a poco Fleetwood va tomando las riendas de su vida, valorando la amistad entre mujeres, sobreponiéndose a los obstáculos y traiciones, y demostrando que ella es mucho más que una futura madre. Me daban ganas de ayudarla y hasta me sentía orgullosa de ella, por todo lo que hace para intentar salvar a Alice, incluso cuando no está tan segura de que sea inocente… Alice es muy distinta. Es de clase pobre y, a pesar de las cosas que le han pasado en la vida, no puede evitar ayudar a los demás, aunque eso acabe trayéndole problemas. Y siempre está rodeada de un aire misterioso… Otra diferencia que tienen es el tipo de madre que les tocó. La de Fleetwood es fría y distante con ella, y a veces desagradable, mientras que en la relación de Alice con la suya se intuye que hubo mucho amor y mucha entrega, también hacia otros, porque le enseñó a ser partera. Y, a pesar de ser tan distintas, entre Alice y Fleetwood se crea un fuerte nexo…
¿A quién se lo recomiendo?
A quien quiera conocer cómo se vivía en la Inglaterra de 1612, más concretamente siendo mujer, y con una ligera intriga. Abstenerse quien busque un libro lleno de hechizos o pociones mágicas, o una historia de terror sobrenatural.
Ritmo de lectura
Al principio un poco más lenta, pero cada vez me fue enganchando más y más, y hacia el final no quería dejar de leer, para conocer el desenlace.
¿Leerías algo más de la autora?
Esta es su primera novela, si publica algo más, estoy prácticamente segura de que lo leeré.
¡Hola!
Pues me ha llamado mucho la atención porque la verdad es que a mí el mundo de las brujas también me está interesando. Además, tiene una ambientación muy interesante y un punto de partida es cuanto menos curioso. Me lo llevo apuntado, te agradezco mucho la reseña.
Un besote!! ^,^!!
ELEB
Super interesante! Me encanta todo este tema de las brujas, y también el papel de la mujer a lo largo de la historia. Parece mentira que hayamos pasado por tanto durante tanto tiempo… Menos mal que poco a poco vamos despertándonos y luchando por que no nos atropellen como han hecho a lo largo de la historia… pero en fin… ese es otro tema. Me ha gustado mucho el planteamiento de la novela, así que me lo apunto! Gracias por el descubrimiento! Nos leemos