Christine Draxler, conocida como Christine Nöstlinger (por matrimonio), nació el 13 de octubre de 1936 en Viena, Austria. Su padre era relojero y su madre educadora infantil. Durante la ocupación nazi tuvieron que ocultar que eran socialistas. Ella fue una niña problemática y la relación con su madre fue difícil, pero por su padre sintió siempre un gran amor. Quiso ser pintora, pero acabó estudiando Artes gráficas en la Academia de Bellas Artes de Viena. Trabajó como dibujante para varios periódicos y revistas. En 1970 publicó su primer libro infantil, Federica la pelirroja, con ilustraciones suyas. En 1971 publicó Los chicos del sótano mágico, con el que obtuvo el Premio al Mejor Libro Juvenil publicado en Alemania. Siguió publicando libros infantiles y juveniles, como Konrad, o el niño que salió de una lata de conservas, Piruleta, Filo entra en acción, Querida Susi, querido Paul, Olfato de detective o Lollipop. En sus libros trató temas como las relaciones familiares, la educación, las relaciones entre jóvenes, la marginación, la intolerancia, el racismo o la liberación de la mujer. En 1984 recibió el Premio Hans Christian Andersen y en 2002 el Premio Memorial Astrid Lindgren.

Más información:
https://es.wikipedia.org/wiki/Christine_Nöstlinger
Frases:
Pero todo el mundo sabe que a los gatos les gustan los balcones y el sol que da en ellos. Y a los gatos, también lo sabe todo el mundo, no se les aparta tan fácilmente con prohibiciones, tampoco de los balcones. Los gatos se acurrucan inmóviles debajo de la mesa de la cocina, nadie en la casa tiene la menor idea de que estén allí y, apenas se le ocurre a alguien abrir el balcón, ya está el gato fuera, sentado entre los cebollinos y la yerba angélica, y ni se le ocurre volver a la cocina. (Rosalinde tiene ideas en la cabeza)