Sinopsis

Esta novela reconstruye un gran amor empezando por su final, la historia de una pareja que, como tantas, se enamoró, vivió una ilusión, tuvo hijos y peleó contra todo ―contra ellos mismos y contra los elementos: la incertidumbre, la precariedad, los celos―, luchó para no rendirse, y cayó varias veces. Cuando el amor se acaba, surgen las preguntas: ¿dónde se torció todo?, ¿cómo hemos acabado así? Todo amor es un relato en disputa, y los protagonistas de este cruzan sus voces, confrontan sus recuerdos, discrepan en las causas, intentan acercarse. Feliz final es una autopsia implacable de sus deseos, expectativas y errores, donde afloran rencores sedimentados, mentiras y desencuentros, pero también muchos momentos felices.

Isaac Rosa aborda en esta novela un tema universal, el amor, desde los muchos condicionantes que hoy lo dificultan: la precariedad y la incertidumbre, la insatisfacción vital, las interferencias del deseo, el imaginario del amor en la ficción… Porque es posible que el amor, tal y como nos lo contaron, sea un lujo que no siempre podemos permitirnos.

¿Por qué me decidí a leerlo?

Fue un cúmulo de cosas lo que me hizo leerlo: que me lo recomendaron, que el tema me interesó y que no había leído nada de este autor.

¿Mereció la pena?

Me ha gustado mucho este libro, contado a través de monólogos, a dos voces, sobre una pareja que está separándose. Se dan cuenta de lo mucho que se han separado sus caminos, cómo les ha cambiado la vida por la rutina, la presión social, los trabajos, la crisis económica… Contándonos su matrimonio desde el final hasta el principio, intentan encontrar cuándo se torció todo. No es una novela agradable de leer, porque toda ella es un drama, en el que todo son reproches de cada uno de los miembros de la pareja.

Me ha parecido interesante que sea una historia a la inversa. Comienza con el epílogo y termina con el prólogo, parte desde el momento del divorcio y va retrocediendo poco a poco durante los 13 años que dura su relación. Y son como mensajes alternantes que se intercambia la pareja, donde se van reprochando constantemente y cargando la culpa en el otro por todo los que les ha pasado durante su vida en común, que ahora se les va de las manos. Yo creo que cualquier pareja, haya pasado o no por una separación, en algún momento de la novela se puede ver reflejada, o podemos ver cosas muy parecidas en parejas que conocemos, porque es la vida misma la que están narrando los dos.

Tiene una frase preciosa con la que empieza el libro y luego se repite a todo lo largo de él: «nosotros íbamos a envejecer juntos», como tantas parejas que empiezan una relación con mucha ilusión, creyendo que su historia es la más bonita del mundo y distinta a la de todos los demás. Pero cada uno evoluciona de una forma distinta y toman caminos diferentes, y al final acaban como tantas otras parejas, cargados de odios y de reproches. Es curioso, y en el libro está muy bien reflejado, cómo se puede hablar de lo mismo con dos visiones totalmente distintas.

Es triste ver cómo se rompen los sueños y las ilusiones de la pareja poco a poco, sin que ninguno de los dos haga nada por solucionarlo y, además, se hacen muchas confesiones cuando seguramente no es el momento apropiado, y por eso se hacen más daño aún. Pero no solo son ellos los culpables, también lo es la sociedad. Nadie se escapa a ella, parece que a todos nos importa a veces más tener cosas que ser personas, y nos obcecamos, sin darnos cuenta del daño que nos hacemos y que hacemos a quien más queremos. Y también queda claro el desgaste del amor, si no lo mimamos y damos por hecho más cosas de las que debiéramos.

 ¿A quién se lo recomiendo?

A los que os gusten las novelas tristes, donde se habla de amor y desamor, de divorcio, de reproches y, sobre todo, de seres humanos, porque el que esté libre que tire la primera piedra.

Ritmo de lectura

Al principio me costó un poco, por la estructura del libro, con esas dos voces, por no saber quién de los dos hablaba, y fui un poco más lenta. Pero después, cuando ya le cogí el tranquillo, he ido con rapidez.

¿Leerías algo más del autor?

Siempre os digo que no me cierro a ningún autor.