Sinopsis
Amparándose en la coartada del terrorismo islámico, unos políticos teócratas se hacen con el poder y, como primera medida, suprimen la libertad de prensa y los derechos de las mujeres. Esta trama, inquietante y oscura, que bien podría encontrarse en cualquier obra actual, pertenece en realidad a esta novela escrita por Margaret Atwood (Premio Príncipe de Asturias de las Letras 2008) a principios de los ochenta, en la que la afamada autora canadiense anticipó con llamativa premonición una amenaza latente en el mundo de hoy.
En la República de Gilead, el cuerpo de Defred sólo sirve para procrear, tal como imponen las férreas normas establecidas por la dictadura puritana que domina el país. Si Defred se rebela —o si, aceptando colaborar a regañadientes, no es capaz de concebir— le espera la muerte en ejecución pública o el destierro a unas Colonias en las que sucumbirá a la polución de los residuos tóxicos. Así, el régimen controla con mano de hierro hasta los más ínfimos detalles de la vida de las mujeres: su alimentación, su indumentaria, incluso su actividad sexual. Pero nadie, ni siquiera un gobierno despótico parapetado tras el supuesto mandato de un dios todopoderoso, puede gobernar el pensamiento de una persona. Y mucho menos su deseo.
¿Por qué me decidí a leerlo?
Había leído muy buenas críticas de la serie de televisión, pero cuando me decidí a verla, alguien me dijo que primero leyera el libro, que me gustaría más. Ahora que ya lo he leído veré la serie.
¿Mereció la pena?
Antes de comprar el libro busqué algunas críticas para ver de qué iba y me encontré con que todo el mundo decía que era una distopía. Yo no sabía el significado de esta palabra y me sorprendí mucho cuando vi que no está registrada en el diccionario de la Real Academia, aunque es de uso corriente en la literatura universal. En contraposición a utopía, la distopía es una sociedad o escenario indeseable en sí mismo. Y eso es exactamente lo que opino sobre la sociedad que describe esta novela.
A mí me ha parecido un libro magnífico, aunque se trate de una historia muy oscura, en la que se nos cuenta cómo se puede quitar todo a las mujeres: su trabajo, sus pensamientos, su capacidad crítica, su sexo, su libertad. También nos cuenta cómo los oprimidos pueden acostumbrarse a situaciones que les coarten sus libertades. Y nos hace entender que por mucho que hayamos ganado en libertades, nos las pueden quitar de un día para otro, por lo que debemos seguir teniendo afán de superación, de no rendirnos jamás.
Es una historia de ciencia ficción (según la autora ficción especulativa) que, por supuesto, es feminista y nos habla, sobre todo, de mujeres y de miedo.
¿A quién se lo recomiendo?
Recomiendo su lectura a todo el mundo, me ha gustado mucho. Y sobre todo a los que busquen en los libros la crítica a nuestra sociedad, en la que siguen faltando libertades para muchas personas.
También se la recomiendo a todos aquellos que renieguen de los fundamentalismos, vengan de donde vengan, porque tan malos son los fundamentalistas musulmanes como los cristianos.
Por último, se lo recomiendo a todos aquellos que piensen que aún nos hace falta luchar por las libertades. Este libro está escrito en 1985 y podemos comprobar que en 32 años en muchas partes del mundo todo continúa igual o incluso ha retrocedido en libertades y derechos humanos.
Ritmo de lectura
A muy buen ritmo. Me tenía tan cabreada lo que contaba la narradora en primera persona, que deseaba saber más cosas de esta sociedad tan distópica y lo he leído en poquísimo tiempo.
¿Leerías algo más de la autora?
Este es el primer libro de la autora que he leído, y me ha gustado tanto que creo que sí, voy a buscar algún otro libro de ella. Aquí tenéis su efeméride.