Sinopsis
«Señores, la locura no es un saco donde puedan meterse todos los actos humanos cuyos motivos no entendamos. La locura tiene su estructura, su lógica. Si se empeñan, podríamos admitir, en último caso, la eventualidad de que un psicópata auténtico, sí, un psicópata, precisamente un psicópata, pudiese ser el culpable. Es la única posibilidad…»
En Londres se están produciendo una serie de extraños acontecimientos. Alguien se dedica a robar cuerpos de personas fallecidas no antes de treinta horas para devolverlos sin más. Sin embargo, los cadáveres pronto empiezan a presentar distintas señales. La policía se inquieta y los encargados del caso, el inspector Sheppard y el detective Gregory, pondrán manos a la obra para intentar esclarecer el porqué de este extraño comportamiento.